El jardín de las celicias

El jardín de las celicias
Con todas estas recetas intento que la infancia de mis hijas, especialmente la de Almudena, sea un poquito más feliz.

viernes, 22 de agosto de 2025

BABKA DE CHOCOLATE




Esta receta de tradición judía, originaria de Europa del Este, nos ha conquistado absolutamente.
Se trata de una “Viennoiserie”, algo que está a caballo entre un pan dulce y un bollo. Su textura abriochada, su ternura y un intenso sabor a chocolate hizo que no pudiésemos esperar y la probásemos calentita. Y qué delicia… Una receta que nadie debe perderse, y mucho menos un celíaco, por desgracia poco acostumbrado a estos manjares… 

INGREDIENTES

Para el prefermento: 

- 340 ml de leche 
- 1cucharadita de azúcar glas
- 7g de levadura seca para masas dulces
- 20g de psyllium. 


Para la masa: 

- 190g de harina de arroz
- 140g de almidón de mandioca
- 50g de fécula de patata
- 35g de harina de trigo sarraceno
- 8g de goma xantana
- 60g de azúcar
- 2 g de sal
- 2 cucharaditas de levadura química
- 1huevo tamaño L
- 50g de mantequilla sin sal en pomada, cortada en cubitos. 


Para el relleno:

- 200g de Nutella o cualquier otra crema de chocolate de tu gusto. 


Para el brillo final (opcional):

- 1 cucharada de azúcar glas
- 2 cucharadas de agua. 


ELABORACIÓN

Entibiamos la leche en el microondas con cuidado de que no quede a más de 35 grados, o de lo contrario la levadura morirá.
Añadimos la cucharadita de azúcar glas y la levadura seca para masas dulces. Removemos bien y dejamos reposar unos 10 minutos o hasta que se forme una espuma en la parte superior.
Agregamos entonces el psyllium y mezclamos bien. Dejamos reposar otros 10 minutos removiendo a mitad de tiempo. Veremos que se forma un gel. Esa es la textura que buscamos, ya tenemos listo el prefermento.

Comenzamos a preparar la masa mezclando todas las harinas con la xantana, el azúcar, la sal y la levadura química. 
Añadimos el huevo y el prefermento.
Amasamos hasta que la masa adquiera una textura suave, y en ese momento agregamos la mantequilla en dados. Continuamos con el amasado hasta que la mantequilla esté completamente integrada y la textura sea suave.

Ponemos la masa entre dos papele de horno y aplanamos ligeramente. Refrigeramos durante unos 40 minutos.
Pasado este tiempo, la masa estará lista para manejarla con facilidad.
Estiramos con el rodillo  hasta conseguir un rectángulo. Como orientación os digo que a mí me quedó aproximadamente de unos 30x35 cm. Ni mucho menos debe ser perfecto. 

Extendemos la Nutella o crema de chocolate elegida, creando una fina capa que cubrirá todo el rectángulo excepto el borde de uno de los lados más cortos.
Enrollamos con cuidado , comenzando por el extremo corto que sí tiene Nutella, para finalizar por el que no la tiene y que así el rollo selle bien.
La masa debe enrollarse lo más tensa posible, pero sin apretarla.
Cortamos un hilo de algodón de unos 10 cm más que la longitud del rollo y pasamos por debajo, colocándolo en el centro. Vamos aproximando los extremos hacia el centro, y veremos cómo la masa se va cortando con suavidad. Un cuchillo o raqueta aplastaría la masa, por muy afilado que esté.
Separamos las dos mitades y las cruzamos formando una X para finalmente entrecruzarlas, haciendo la espiral característica.
Colocamos sobre un molde rectangular bien engrasado o cubierto con papel de hornear.
Cubrimos con film transparente y dejamos levar en un lugar alejado de corrientes de aire, hasta que veamos que la parte superior toca los bordes del molde.
Horneamos en horno precalentado a 200ºC, bajando la temperatura a 175ºC una vez introducido el molde. Deberemos hornearlo con la rejilla situada en la parte más baja, con calor abajo y aire.
De este modo tardará unos 30 minutos. Si véis que comienza a dorarse en exceso, tapad con papel de aluminio.


Sacamos del horno y dejamos enfriar en el molde. 
Es el momento de bañarlo con el glaseado si así lo decides. Mezcla el azúcar glas con el agua y remueve bien. Pinta el babka con un pincel de cocina mientras todavía esté caliente. 
A los pocos minutos ya podrá consumirse. También podemos dejarlo enfriar sobre una rejilla para consumirlo frío. Aguanta varios días tierno.

Aquí dejo un vídeo con el paso a paso, espero que os sirva.




¿Vas a dejar de probar este placer tan  irresistible?





sábado, 14 de junio de 2025

MINI BUNDT CAKE DE FRAMBUESA Y MASCARPONE CON CHOCOLATE BLANCO




Los frutos rojos siempre llaman mi atención en la frutería. Su sabor, dulce y con un ligero toque ácido, es ideal para la repostería. Su combinación con el chocolate siempre es un acierto, para mi gusto mucho mejor el blanco.
Si a esto le sumamos una presentación vistosa, estos pequeños bocados pueden ser un regalo perfecto. Si tenéis un molde parecido al mío, el resultado será un éxito. Si no es así, siempre podéis transformarlos en unos deliciosos muffins recubiertos de chocolate.

Por cierto, no me quedó más remedio que bañar 3 de estos bollitos en chocolate con leche. Mis hijas no me lo perdonaban de otra manera.

INGREDIENTES: (para 12 mini bundts)

- 115g de harina de arroz
- 50g de almidón de maíz
- 1/2 cucharadita de psyllium
- Puntita de cuchara de goma xantana
- 1 cucharadita de levadura química tipo Royal
- 1/2 cucharadita de bicarbonato de sodio
- 1/4 de cucharadita de sal
- 75g de azúcar
- 40g de mantequilla en pomada
- 125g de queso mascarpone
- 1 huevo tamaño L
- 1/2 cucharadita de extracto de vainilla
- 110 g de frambuesas frescas

Para la cobertura 
- 250g de chocolate blanco
- 1 cucharadita de aceite de coco o mantequilla


ELABORACIÓN: 

Precalentamos el horno a 200ºC.
Mezclamos en un bol las harinas, el psyllium, la xantana, la levadura, el bicarbonato y la sal. Reservamos.

Batimos el huevo junto con el azúcar. Añadimos la mantequilla y después el queso mascarpone. Agregamos a continuación la vainilla y batimos hasta que la textura sea homogénea.

Añadimos poco a poco la mezcla de harinas. El resultado es una masa muy densa, imprescindible para que las frambuesas no caigan al fondo. 

Para terminar, agregamos las frambuesas. Yo las corté en 4 porque el molde tiene huecos pequeñitos. Si hacéis muffins, perfectamente pueden ir enteras.

Engrasamos un molde y vertemos la masa, llenando hasta 2/3 de la capacidad de cada hueco.
Introducimos el molde en el horno, en la rejilla a media altura, con calor arriba y abajo, y bajamos la temperatura a 180ºC. 

En mi caso, se hornearon en 14 minutos. Si son muffins, que son más grandes, probablemente necesiten unos 20 minutos.

Sacamos y dejamos enfriar sobre una rejilla.

Cuando estén bien fríos, fundimos el chocolate con el aceite de coco al baño maría o en el microondas. 
Ponemos un poco de chocolate blanco en cada hueco (un poco menos de la mitad) y colocamos los bollitos, presionando bien.
Congelamos aproximadamente 30 minutos. Sacamos del congelador y damos unos pequeños golpes sobre la encimera, y veremos cómo caen los bollitos junto con su concha.

¡Y a disfrutarlos!




Os dejo un vídeo para que veáis lo fácil que resulta el proceso.






domingo, 1 de junio de 2025

DONUTS DE CHOCOLATE Y NARANJA

 


La combinación de chocolate y naranja es algo mágico. Pero cuando se trata de unos pequeños bocados como estos donuts, se vuelve una maravilla.

Para hacerlos, es necesario tener un molde de silicona para donuts. No se trata de unos donuts al uso, sino que se hacen con levadura química (tipo Royal), y en el horno.

Hice dos versiones: una con un glaseado de naranja que es una auténtica perdición, y los clásicos bañados en chocolate negro. Si me tuviese que decidir, me quedo con los primeros.

La receta es una adaptación de un libro de donuts americano titulado “Mini Donuts: 100 Bite-Sized Donuts Recipes to Sweeten your “hole” day. ¿Tienes en casa un juego de cups? ¡Pues venga, guarda la báscula y saca tus cups!


INGREDIENTES

Para los donuts (sale una docena):

- 1 taza de harina de arroz
- 1/3 taza de almidón de maíz
- 1 cucharadita de psyllium
- 1 puntita de cuchara de goma xantana
- 1⁄2 taza de cacao en polvo desgrasado
- 2 cucharaditas de levadura química
-1⁄4 cucharadita de sal
- 1 huevo L
- 3⁄4 taza de azúcar 
- 2 cucharaditas de ralladura de naranja
- 1 cucharada de zumo de naranja
- 3 cucharadas de AOVE
- 1⁄4 taza de yogur natural
- 1 cucharadita de extracto de vainilla
- 1⁄2 taza de leche 

Para el topping

- 1⁄2 taza de azúcar
- 2 cucharadas de ralladura de naranja

Para el glaseado de naranja

- 1 cucharada de zumo de naranja
- 1 cucharadita de extracto de vainilla
- 1 y 1⁄2 tazas de azúcar glas

Para la cobertura de chocolate:

- 150g de chocolate negro
- 1 cucharadita de aceite de coco o mantequilla


ELABORACIÓN

Precalienta el horno a 200ºC.
En un bol, tamiza las harinas, el cacao en polvo, el psyllium, la xantana, la levadura y la sal. Reserva.
En un bol mediano, bate el huevo y el azúcar. Luego agrega la ralladura de naranja, el zumo de naranja, el aceite, el yogur natural y el extracto de vainilla, mezclando hasta que se combine completamente. 
Agrega suavemente la mezcla de harina, alternando con la leche, revolviendo hasta que no queden grumos. 
Llena cuidadosamente los moldes para donuts bien engrasados, hasta 2/3 de su capacidad.



Hornea durante unos 20 minutos o hasta que un palillo insertado en un donut salga limpio. 



Transfiere los donuts a una rejilla para que se enfríen completamente. 


En un tazón pequeño, mezcla el azúcar y la ralladura de naranja con los dedos hasta que la ralladura se distribuya uniformemente. Reserva. 
Coloca papel de horno debajo de una rejilla para recoger cualquier goteo y facilitar la limpieza.
En un bol pequeño, bate el zumo de naranja y el extracto de vainilla. Agrega el azúcar en polvo y bate hasta que quede suave. 
Sumerge la parte superior de cada donut en el glaseado y transfiere a la rejilla. Espolvorea inmediatamente con la mezcla de azúcar y ralladura. Deja reposar los donuts durante al menos 5 minutos antes de consumir.




Para cubrir los donuts con el chocolate, pártelo en trozos pequeños y fúndelo al baño maría o en el microondas, junto con el aceite de coco o mantequilla.
Sumerge los donuts hasta la mitad, espolvorea con el azúcar con ralladura y deja secar en una rejilla. 



Se conservan muy bien en un tupper o cubiertos con papel film, durante 3 ó 4 días. ¡Pero no durarán tanto! 

Su interior es un espectáculo. Y su sabor... ¡Mmmm...! ¡Inigualable! 


¿Te vas a quedar sin probarlos? 

BIZCOCHO DE ROSA



La primavera llegó, y con ella un cambio en nuestro estilo de vida. Las temperaturas suaves nos animan a salir más a la calle, a quedar con aquellas personas que hace tiempo que no vemos, a disfrutar un poquito más de nuestro tiempo libre.

El sabor de este bizcocho me recuerda mucho a esta época del año. Quizá es el aroma de las rosas o la frescura del limón, pero lo cierto es que no lo relaciono con el frío o la oscuridad del invierno. 
Tenía este molde sin estrenar, regalo de mi cumpleaños, esperando el momento adecuado. Quise probar la receta que recomendaba el fabricante. Siempre las pruebo y las conservo, son una maravilla. Y esta en concreto me encantó.
Lleva como ingrediente el agua de rosas. Yo no tenía en casa, pero en cambio sí tenía un aceite esencial de rosas, un aroma más concentrado cuyo sabor se consigue con solo unas pocas gotas. Y fue lo que utilicé.
Os dejo la receta tal cual, con la adaptación a nuestras harinas. Veréis que no está hecha con arroz y maíz como normalmente, porque en la receta decía que había que utilizar "bread flour", o "harina para pan", así que utilicé los almidones que hubiese utilizado para tal fin, y omití las proteicas para que quedase más suave.
Las medidas están en “cups” o tazas, cucharadas y cucharaditas. Recordad que una taza equivale a un vaso de los de agua.

INGREDIENTES:

 Para el bizcocho:

- 1/2 cucharadita de cardamomo molido
- 1/2 taza de harina de almendra
- 1/3 de taza de harina para pan (la mitad almidón de maíz y la otra mitad de almidón de patata)
- 3 cucharadas de almidón de mandioca
- Puntita de cuchara de goma xantana
- 1 cucharadita de psyllium
- 1/2 taza de pistachos molidos
- 1/2 cucharadita de levadura química
- 1/4 de cucharadita de bicarbonato
- 1 pizca de sal
- 10 cucharadas de mantequilla en pomada
- 3/4 de taza de azúcar
- 2 cucharadas de azúcar moreno
- 2 huevos L a temperatura ambiente
- 1/2 cucharadita de ralladura de limón
- 1 1/2 cucharadita de zumo de limón
- 1 cucharada de agua de rosas (yo le puse 5 gotas de mi esencia de rosas)
- 1/4 de cucharadita de extracto de vainilla

Para la crema de agua de rosas: 

- 3/4 de taza de nata montada bien firme
- 1/4 de taza de crème fraîche
- 1 cucharada de azúcar
- 1 cucharada de agua de rosas (yo puse 3 gotas de mi esencia de rosas)

Para el glaseado de agua de rosas: 

- 1/4 de taza de zumo de limón recién exprimido
- 3 cucharadas de agua de rosas (yo le puse 7 gotas de mi esencia de rosas)
- 1/4 de taza de azúcar
- 1 cucharada de mantequilla

Para servir, se puede acompañar de pistachos laminados y pétalos de rosa.


La última vez que hice este bizcocho, prescindí de la crema y del glaseado, y lo bañé con 225g de chocolate Ruby, de color rosa y sabor afrutado, abrillantado con una cucharadita de aceite de coco o mantequilla. Lo hice con el molde según la técnica de la "concha" de Bea Roque.


ELABORACIÓN

Precalienta el horno a 200ºC.
Engrasa un molde, bien con mantequilla y espolvoreado con harina, o bien con spray desmoldante.
Mezcla en un bol harinas, cardamomo, pistachos picados, levadura química, bicarbonato, sal, psyllium y xantana. Reserva.
Bate la mantequilla junto con el azúcar hasta que la mezcla sea cremosa. Añade entonces los huevos uno a uno y continúa batiendo.
Añade poco a poco la mezcla de harinas sin batir en exceso. 
Agrega la ralladura y el zumo de limón, el agua de rosas y el extracto de vainilla, y mezcla hasta que la masa sea homogénea.
Vierte la masa en el molde engrasado e introduce en el horno, sobre la rejilla, a media altura.
Baja la temperatura a 180ºC y hornea con calor arriba y abajo, unos 40-50 minutos, hasta que un pincho salga limpio.
Saca del horno y déjalo enfriar en el molde durante 10 minutos.


Si quieres poner el glaseado por encima, calienta todos los ingredientes en una cacerola pequeña, a fuego medio, hasta que la mantequilla se haya derretido y el azúcar esté disuelto. Antes de desmoldar, haz varios agujeritos sobre la parte posterior del bizcocho y pincela con el glaseado. A contiuación desmolda el bizcocho  y colócalo sobre una rejilla. Píncela la parte superior del bizcocho repetidamente hasta que se agote todo el glaseado. Empapará el bizcocho y le dará más sabor y humedad.




Por último, si quieres servir el bizcocho con la nata de rosas, bate la nata con una batidora de varillas hasta que se formen picos suaves. Incorpora suavemente la crème fraîche, la vainilla, el agua de rosas y el azúcar, y bate hasta que esté perfectamente montado. Reserva en la nevera hasta que lo necesites.

Si quieres presentarlo con una concha de chocolate ruby, funde el chocolate en el microondas o al baño maría junto con una cucharadita de aceite de coco o mantequilla. Ponlo sobre el molde y a continuación presiona el chocolate con el bizcocho, con cuidado de que que encaje perfectamente.
Mete al congelador al menos durante 20 minutos. Dale la vuelta al molde y aplica un golpe seco sobre su superficie. Caerá, como por arte de magia, un bizcocho con una concha preciosa. Si tras varios golpes no logras que se desmolde, congela por otros 20-30 minutos y conseguirás que se desmolde, seguro.






Para servir el bizcocho con el glaseado y la nata de rosas, córtalo en rodajas de un dedo de grosor. 
Sirve con una cucharada de nata y espolvorea con pistachos y pétalos de rosa, si tienes a mano.



¿No os parece una maravilla? A mí me parece absolutamente fascinante, precioso, y sobre todo, delicioso.