El jardín de las celicias

El jardín de las celicias
Con todas estas recetas intento que la infancia de mis hijas, especialmente la de Almudena, sea un poquito más feliz.

lunes, 5 de octubre de 2020

MAGDALENAS “ANABEL” O LAS MEJORES MAGDALENAS QUE HAYAS PROBADO JAMÁS

 


Mi compañera Anabel hace las mejores magdalenas del mundo mundial. Tiene una mano increíble. Da igual lo que les ponga: nueces, piñones, orejones, chocolate... siempre sabe combinar con maestría los ingredientes para conseguir el sabor perfecto. Son unas magdalenas muy diferentes a las clásicas que yo solía hornear en casa. El sabor no es ni parecido. Son increíblemente deliciosas. ¡No podéis dejar de probarlas!

Y como soy de las que piensa que una buena receta lo es todo a la hora de cocinar, me animé a pedirle su receta mágica e intentar adaptarla al mundo sin gluten. El resultado es estupendo, aunque lo confieso: las suyas están infinitamente mejores. Y no es porque estén hechas con harina de trigo, no. Es porque están hechas por ella.

INGREDIENTES

- 4 huevos
- 1 sobre de azúcar vainillado
- 150g de azúcar blanco
- 100 ml de aceite de girasol
- 125g de almendra molida
- 1 yogur natural, o mejor aún, griego
- 70g de harina de arroz
- 30g de almidón de maíz
- 70g de harina de avena (recordad que debe estar etiquetada “sin gluten”)
- 1 cucharada de levadura química tipo Royal
- 1 cucharadita de psyllium
- Puntita de cuchillo de goma xantana
- 1 cucharadita de jengibre en polvo
- 10-12 gotas de aceite esencial de un cítrico (limón, naranja, mandarina...)
- Chocolate blanco al gusto
- Orejones de melocotón al gusto (yo no le pongo porque en casa no gustan, pero a mí me encantan con ellos también).

ELABORACIÓN

Batimos los huevos junto con el azúcar y el azúcar vainillado. Añadimos el aceite poco a poco, y a continuación el yogur. 
Cuando esté todo integrado, añadimos el aceite esencial. No es imprescindible, pero realmente le da un toque muy rico.
Mezclamos en un bol las harinas junto con el psyllium, la xantana, el jengibre y la levadura, y lo añadimos a la mezcla con el robot en marcha lenta. El aspecto de la masa es similar a esto: 


Para finalizar, añadimos unos trocitos de chocolate blanco. Anabel utiliza los famosos “Candy melts”, que además están teñidos de colores y le dan a las magdalenas una estética formidable. Yo aún no los he conseguido sin gluten, pero no digo que no existan. Para sustituirlos, simplemente corto las onzas de chocolate blanco con un cuchillo.


El sabor es similar, porque los Candy melts no son otra cosa que chocolate blanco teñido de colores.
Añadimos el chocolate a la mezcla, y aquí podemos agregar cualquier otro ingrediente que nos apetezca. Yo últimamente le pongo semillas de cáñamo peladas, porque Almudena anda con el hierro justito. Le dan un sabor a fruto seco muy agradable.


Mezclamos con una espátula y rellenamos nuestros papeles de magdalenas. Siempre recomiendo colocar los moldes de papel en un molde metálico porque se reparte mejor el calor, la cocción es más homogénea, y además las magdalenas alcanzan mayor “copete”. 
Solo nos falta poner unos cuantos trocitos de chocolate más sobre la masa, para darle el toque final.


Introducimos en horno precalentado a 200ºC, en la rejilla central, y bajamos la temperatura a 170ºC. Estarán listas en unos 15 minutos.
Comprobamos el grado de cocción pinchando en el centro, debe salir limpio.
Sacamos del horno y dejamos enfriar sobre una rejilla.


El interior es muy esponjoso, ¡ya os digo que merece mucho la pena hacer esta receta!


¡Probadlas y me contáis!